En este artículo comparto seis buenas prácticas para aplicar la Inteligencia Artificial en el entorno empresarial, inspiradas en el manifiesto interno del CEO de Shopify.
Tobi Lütke, fundador de esta conocida plataforma en comercio electrónico, ha establecido una serie de principios que reflejan una realidad cada vez más evidente: la inteligencia artificial en las empresas ya no es opcional, sino una herramienta estratégica.
Si estás buscando cómo introducir o consolidar el uso de la IA en tu organización, estas prácticas pueden ayudarte a hacerlo con criterio, enfoque y visión a largo plazo.
1. Fomentar el uso de la inteligencia artificial en las empresas como habilidad básica
El primer paso es dejar de ver la IA como algo técnico o especializado. Hoy en día, su uso es una expectativa básica para cualquier empleado, sin importar su rol o nivel de experiencia.
Como afirmó Tobi Lütke en X, “el uso reflexivo de la IA es ahora una expectativa básica en Shopify”. Esto implica que herramientas como ChatGPT, Notion AI o Google Gemini se incorporan en el trabajo diario como apoyo a la productividad.
2. Incluir la inteligencia artificial en las empresas desde la fase de prototipado
Uno de los mayores errores es dejar la tecnología para el final. Shopify plantea que la IA debe explorarse desde el inicio de cualquier proyecto, especialmente en la fase de prototipado, donde todo está más abierto a la experimentación.
Probar ideas rápidamente con IA permite ahorrar tiempo, detectar errores y generar soluciones más creativas. Esta práctica es especialmente útil en entornos de desarrollo, diseño de producto o marketing.
3. Evaluar el uso de herramientas digitales en el desempeño profesional
En Shopify, el uso de sistemas basados en IA será considerado en las evaluaciones de desempeño. No se trata solo de lo que consigues, sino de cómo usas los recursos disponibles para lograrlo.
Este enfoque fomenta la adopción natural de la tecnología y ayuda a integrar la automatización como parte de la cultura del trabajo.
4. Apostar por el aprendizaje autodidacta y la cultura compartida
El aprendizaje sobre IA debe ser autodirigido, proactivo y colaborativo. Cada persona tiene la responsabilidad de formarse por su cuenta, pero también de compartir lo que aprende con su equipo.
Esto crea un entorno de mejora continua, donde los avances no dependen solo de una formación formal, sino del intercambio real de experiencias.
5. Evaluar antes si una solución inteligente puede evitar nuevas contrataciones
Antes de solicitar la contratación de nuevas personas, Shopify plantea un enfoque radical pero eficiente: preguntarse si una herramienta de IA puede hacer ese trabajo.
No significa reemplazar personas, sino ser más conscientes de dónde aporta valor real el talento humano. Este tipo de análisis puede ayudar a redistribuir mejor los recursos y a evitar tareas repetitivas innecesarias.
Un buen punto de partida es revisar plataformas como Zapier o Make.com para automatizar procesos internos sin necesidad de ampliar plantilla.
6. Liderar con el ejemplo: la IA empieza desde la alta dirección
Por último, Shopify deja claro que la adopción tecnológica no puede depender solo de los equipos operativos. Debe ser visible y activa desde los niveles más altos de la organización.
Cuando los líderes utilizan IA en su día a día, no solo muestran coherencia, sino que normalizan su uso y motivan a los demás a hacer lo mismo.
Este punto es fundamental para que la transformación digital no se quede en un discurso vacío.
Conclusión: la inteligencia artificial en las empresas es una cuestión de cultura, no solo de tecnología
Lo que plantea Shopify no es solo una estrategia técnica, sino una nueva forma de entender el trabajo. La inteligencia artificial aplicada de forma transversal puede mejorar la productividad, fomentar la innovación y crear equipos más autónomos y eficientes.
La clave está en integrar la IA de manera natural, con foco en las personas, los procesos y el liderazgo. Y hacerlo ya, porque quien antes se adapte, antes podrá diferenciarse.
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